Los Celtics se atreven con Durant

Una de las versiones más poderosas e igualadas de la Conferencia Este en muchos años terminó, no podía ser de otra manera, con los playoffs resueltos en un triple empate y en un juego de espejos en los que se eligieron rivales… o más bien se huyó de ciertos emparejamientos. Los Heat, ya primeros matemáticamente y con ventaja de campo en todas las series de la Conferencia, cerraron con una intrascendente derrota en Orlando (125-111) sin nadie de los principales en pista. Con eso sí, 36 minutos muy bien aprovechados para Victor Oladipo, que puede ser una wildcard de los de Florida en playoffs: 40 puntos, 10 rebotes, 7 asistencias. Y con 20 minutos para Udonis Haslem, que jugó con 41 años y 306 días. Los Magic terminan 22-60, en el último puesto de la Conferencia y, en plena reconstrucción, con la vista puesta única y exclusivamente ya en la lotería del draft.

Como horas antes, en el turno matinal, y Raptors y Bulls iban a ser quinto y sexto, el morbo estaba en ver qué querían hacer Celtics y Sixers. Especialmente después de que los Bucks se dejaran ir de forma descarada en Cleveland para evitar un segundo puesto que envía a, si todo sigue un curso normal, una primera ronda peligrosísima contra los Nets de Kevin Durant y Kyrie Irving. El campeón eligió la tercera plaza, que quita el factor cancha más allá de primera ronda pero permite arrancar con un duelo a priori más accesible contra unos Bulls en un momento muy bajo. Los Celtics tenían la llave, una con trampa: si ganaban adelantaban a los Bucks y cerraban el curso segundos del Este. Si perdían… podía caer hasta la cuarta plaza en caso de que los Sixers se impusieran a los Pistons. Así que los Celtics eligieron no especular y arrasaron en Memphis a unos Grizzlies sin