LEGANÉS | Borja Garcés, kilómetro cero
Borja Garcés ha puesto a cero su cuentakilómetros en Butarque. Es como si el mercado invernal hubiera reiniciado por completo la situación del melillense en el, que de ahora en adelante, tendrá que volver a ganarse los galones de los que gozó a finales de 2021 en una titularidad entonces incontestable y ahora zarandeada por las circunstancias de su equipo. La vuelta de Jon Bautista, el fichaje de Yacine Qasmi, sus intentos de salir en enero y un rendimiento goleador todavía alejado de lo que se esperaba han hecho que el ariete vuelva al punto de partida, eso sí, con la ventaja de que su entrenador, Mehdi Nafti, aprecia los esfuerzos que hace juegue 90 minutos o solo el descuento de un partido.
“A Borja sólo le falta el gol”, valoraba recientemente el técnico franco-tunecino. “Estoy encantado con su trabajo. El otro día, contra el Alcorcón, entra primero Yacine y luego él. Ante el Tenerife fue lo mismo. Pero sólo hay que ver su rendimiento. Este chico siempre suma. Se lo digo mucho. Me da pena que no haya hecho gol. Es el que más se lo merece”, añadió para poner énfasis en el trabajo tapado, pero insistente, que hace el ariete, cedido por el Atlético de Madrid, en su deseo por aportar a su equipo.
Sucede, sin embargo, que el fútbol es para los delanteros un deporte de casi exclusivamente goles. Cualquier ariete con poco acierto reduce sus posibilidades de tener minutos. Es lo que le está sucediendo a Borja. Con solo dos dianas en lo que llevamos de curso (uno de penalti), su puntería se aleja de lo que de él se esperaba. La última diana la anotó la hizo el 28 de noviembre. Demasiado lejos en el tiempo.
No es que Jon Bautista, ahora titular con el Leganés, ande mejor de cara a la meta rival. Su último gol data de septiembre