Eze Ponce es el Rayo

Eze Ponce, el hombre que vino del frío invierno de Moscú y en la recta final de una grave lesión de rodilla, fue el verdugo de un Rayo que sigue negado en este 2022. El Elche, en una remontada casi heroica, le endosó una nueva derrota al equipo de Iraola, al que el cambio de año y la Copa le están haciendo mucho daño. Vuela el equipo de Francisco hacia la salvación. El Elche es mucho más que Boyé. El cuadro franjiverde cuenta con uno de los hombres más en forma de la Liga, como es Pere Milla. El catalán, en esta ocasión, no marcó, pero fue decisivo en la remontada. Participó en los goles de Carillo y Eze Ponce, el killer silencioso que sólo necesitó unos minutos en el campo para demostrar que en Elche puede ser feliz.

El Rayo saltó sin miedo, como si no le pesase la mochila de mal estudiante fuera de casa. El equipo de Iraola se hizo con el control. Trejo mandaba e intentaba lanzar a los puñales. Balliu y, sobre todo, Fran García percutían una y otra vez. Barragán lo pasaba mal. Álvaro, el estilete más en forma del Rayo, falló una de esas que no suele perdonar. Guardiola le metió un pase perfecto de espaldas y el extremo se plantó solo ante Badia. Disparó fuera. El Elche intentó quitarse el miedo y Roco puso a prueba a Luca con un remate de cabeza. La sensación de peligro era del Rayo, pero el Elche, consciente de la sequía goleadora visitante, se marchó tranquilo al descanso.

Todo cambió al poco de empezar la segunda parte. Fran García se inventó un golazo, con ayuda de Roco, y la clavó en la escuadra. Ese tanto le dio paz al Rayo, que se veía con los tres puntos en el bolsillo y con la primera victoria de 2022 en el zurrón. No contaba el cuadro de Iraola con la reacción del Elche. Francisco agitó el banquillo y despertó