Tomás Roncero
El paso del tiempo es cruel e inexorable. Nos llega a todos porque nadie es Peter Pan ni Dorian Gray. El 'Loco' Gatti lo define así: «Le ha llegado el viejazo». Raúl se fue del Madrid con 33 años, los mismos que Cristiano cuando se marchó a la Juventus, Casillas con 34, Fernando Hierro y Sergio Ramos con 35… Pues Casemiro 'solo' cumple hoy 30, la edad ideal de un futbolista de élite que se cuida como él, Kroos está en 32 (ídem de ídem) y Modric, desafiando a las leyes de la naturaleza cada día que pasa, sigue deslumbrando al personal a sus 36 años. No están quitando el puesto a ningún joven talento. Son mejores y cuando faltan su hueco es difícil de suplir...
Camavinga, 19 años, y Valverde (23), tienen muy buena pinta. Pero al francés le falta mucha 'mili' para emular a Casemiro y al uruguayo le acosan las lesiones y cierta irregularidad en cuanto puede jugar tres partidos seguidos. A esa Santísima Trinidad de la medular blanca nadie le está pagando una jubilación anticipada. Ni ellos lo necesitan. Se sienten bien, de cuerpo y de cabeza, y es normal que primero Zidane y ahora Ancelotti se encomienden a ellos en los días grandes. Ya sé que en París no estuvieron a la altura de la cita. Pero quitando a Courtois y a Militao, ¿quién lo estuvo aquella noche? Este trío nos seguirá dando títulos, prestigio y grandeza. Escrito queda.
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