Se dijo que Honda dejaría la Fórmula 1 tras el pasado GP de Abu Dhabi, que les proclamó campeones del mundo dentro del RB16B de Max Verstappen, y que Red Bull confeccionaría sus propios motores. Pero con el paso de los meses, los éxitos en Milton Keynes y la congelación de las unidades de potencia de 2022 en adelante, los términos de la desvinculación de la fábrica japonesa y la casa austriaca han variado y no se producirá como tal. Hasta la temporada 2025, hay acuerdo (que se concretará pronto) para que los ingenieros nipones asistan a Red Bull. Además, los motores se ensamblarán en Sakura, como hasta ahora, y no en la planta que habían previsto en Inglaterra.