Otoño de 2001. El Barça tiene un acuerdo con Leo Messi y su familia para que el pequeño talento rosarino se una al club. 100 millones de pesetas por temporada es el salario que tenía garantizado, según explica Guillem Balagué, periodista y biógrafo de Messi, en . En ese momento, el conjunto blaugrana cambió de director deportivo. Llegó Javier Pérez Farguell, que se quedó anonadado al ver el contrato con Leo. Lo consideraba excesivo y presentaron una propuesta menor. "¿Quién se cree que es? ¿Maradona? Paremos esto y que regrese a Argentina", dijo un dirigente, relata Balagué.