La noche de la ilusión
La gloria está demasiado cerca como para no ilusionarse. El Rayo ha vuelto a una semifinal de Copa 40 años después, por los tres que llevaba sin hacerlo el Betis. Una radiografía del estado anímico de ambos. Para los madrileños sólo entrar en la final ya es un hito, un sueño, un imposible factible. Mientras que para los sevillanos —los favoritos a la corona— es casi una obligación plantarse en La Cartuja. no empaña el buen momento de los de Pellegrini, que amenazan. Un partido que terminó con la expulsión de Álex Moreno y, al que tildaron de «incomprensible» y calificaron de «ignominia» lo vivido.


