Riazor ya es historia viva de la Youth League
El estadio de Riazor vivió este miércoles una noche mágica en Europa a la que solo le faltó la clasificación. Sobre el campo, los juveniles de Manuel Pablo fueron superiores al Dinamo de Kiev cuando hubo igualdad numérica. Los jóvenes cachorros blanquiazules, que, consiguieron llegar hasta los penaltis tras aguantar una hora con un jugador menos. En los once metros se acabó su sueño en un adiós pleno de orgullo que tuvo otro gran protagonista: una afición deportivista que respondió como nunca a pesar de que el partido se disputó en horario laboral (19:00 horas).


