Riazor ya es historia viva de la Youth League

El estadio de Riazor vivió este miércoles una noche mágica en Europa a la que solo le faltó la clasificación. Sobre el campo, los juveniles de Manuel Pablo fueron superiores al Dinamo de Kiev cuando hubo igualdad numérica. Los jóvenes cachorros blanquiazules, que, consiguieron llegar hasta los penaltis tras aguantar una hora con un jugador menos. En los once metros se acabó su sueño en un adiós pleno de orgullo que tuvo otro gran protagonista: una afición deportivista que respondió como nunca a pesar de que el partido se disputó en horario laboral (19:00 horas).

Con el primer equipo en Primera RFEF, la gesta de los canteranos en su primera participación en la Champions juvenil congregó en Riazor a 20.115 espectadores generando un ambiente que de principios de siglo. La cifra se mete de lleno en la historia de la competición, ya que es la segunda más alta en todas las ediciones de la Youth League. El primer puesto data de la temporada 2017-2018 en la que un Krasnodar-Real Madrid congregó a 32.510 espectadores.

La conexión de la afición blanquiazul con sus juveniles no se limitó al partido del miércoles ante el Dinamo de Kiev. En su estreno en Riazor en la Youth League ante el Pogon polaco se dieron cita 8.522 espectadores, lo que ya suponía el récord en una fase previa. y en el siguiente cruce ante el Maccabi Haifa se citaron en el estadio coruñés 12.189 personas. Todo un logro que convierten esta entrada en la sexta más alta en la historia de una Youth League que ha multiplicado la ilusión de la incansable afición coruñesa.

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