Un surfista salva a dos niños de morir arrastrados por las fuertes corrientes

As Acción

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El pasado sábado, 21 de mayo, Pierre-Oliver Coutant estaba dando una de sus clases de surf a dos alumnos en La Barre, una de las múltiples playas atlánticas con las que cuenta el municipio de Anglet (Francia) y por lo que es famoso en el mundo del surfing. De repente, la madre de uno de sus alumnos le hizo señas para indicarle que había un problema a tocar del espigón: dos niños estaban siendo arrastrados por las corrientes y se les veía a punto de ahogarse.

Fue así como el instructor se acercó con su tabla de surf a la zona y pudo salvarlos. La madre de su alumno lo grabó todo en vídeo. Y el protagonista lo contaba de la siguiente manera en redes sociales (tras el vídeo):

«Los que conocen bien las playas de Anglet saben que la corriente que corre por los espigones sirve de vía rápida para los surfistas para volver más rápido al pico. En el vídeo, dos bañistas que no se conocen son arrastrados por esa corriente. Preso por el pánico, uno de ellos usa a la otra como boya para no ahogarse (instinto de supervivencia). Por suerte pude intervenir a pocos segundos de una auténtica tragedia.

Los surfistas que se quedan sobre su tabla son mis alumnos, en ningún caso surfistas que se quedan surfeando en lugar de ayudarme. Son adolescentes a los que indiqué que esperaran a mi regreso. De hecho, traje a la niña de vuelta mientras uno de ellos cargaba al otro con su tabla.

La persona que graba es la madre de mis alumnos. Es muy raro tener vídeos de este tipo de situaciones. Pero ya que los hay, espero que ayuden a concienciar a la sociedad. Bañarse en un lago, río o en las olas del mar es muy diferente a nadar en una piscina. En estos entornos nos exponemos, muchas veces sin saberlo, a riesgos de la propia naturaleza