Suárez, ejemplar en su final

Seis meses han pasado desde aquel momento en el que Luis Suárez vio su número en el cartelón. Enfrente el Liverpool, él sustituido. Lo enfrentó cariacontecido, con mala cara. Entonces era titular indiscutible. Seis meses después ya no lo es, seis meses después su sitio en el Atlético es el banquillo. Y desde el cuerpo técnico se encomia y resalta la profesionalidad con la que lo está asumiendo. El uruguayo llegó al Atlético hace dos veranos, con un contrato hasta este junio que se terminará que, de momento, no se ha producido. Sus últimos partidos habiendo perdido su sitio en el once pero como si no.

Suárez es el primer futbolista que llega a los entrenamientos en el Cerro y el último que se va. Entrena con una profesionalidad que contagia, que el cuerpo técnico premió la jornada pasada en el partido en San Mamés con la titularidad. Se la gana día a día.

Son múltiples, además, en las redes sociales. Todos de empuje, de ganas de terminar la temporada con el objetivo cumplido, clasificarse entre los cuatro primeros, la próxima Champions. De hecho, en las redes sociales comenzó la semana pasada una campaña para pedir una placa con su nombre en el Paseo de Leyendas. Si su contrato finaliza ahora en junio no alcanzará los cien partidos necesarios para tener una. Pero fue el héroe de la temporada pasada, con 21 goles. Ésta lleva 13, por debajo, lo que no impide que sea el líder en el ránking de goleadores rojiblancos.

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