Antes de comenzar la temporada, en la presentación de Mercedes, Hamilton prometió que este año exhibiría su mejor versión. Entonces la postura del británico mostraba una confianza total en la escudería de Brackley, basado en el dominio total que mostraron durante la era híbrida. Sin embargo, con la entrada del nuevo reglamento, el equipo de la estrella ha cedido todo su poder a Red Bull y Ferrari, para desaparecer de manera inmediata en la lucha por un título que ansiaba Lewis después de cómo terminó la temporada 2021.
Las opciones resultan utópicas esta temporada pese a que tan solo se han disputado cuatro carreras. De hecho, desde que cambió el sistema de puntuación en 2010, el de esta temporada supone el peor arranque de Hamilton en el Gran Circo. El británico solo ostenta 28 puntos en su casillero junto a un Mercedes que no llega al nivel de los favoritos y después de que el siete veces campeón se quedase fuera de los puntos por primera vez en el GP de Emilia Romaña, desde Brackley salieron en su defensa para mostrarle todo su apoyo.
Toto Wolff le prometió le prometió seguir trabajando en la evolución de un monoplaza que necesita mejorar a marchas forzadas, después defendió que el británico no cuenta con las armas para pelear en cabeza (pese al cuarto de Russell en Ímola) y aunque se trata de la voz más autorizada de Mercedes para valorar cuál es la situación de la escudería, hay quien la pone en duda y al mismo tiempo, también cuestiona el rendimiento de Hamilton.
Ha sido Nico Rosberg en Sky, quien ha asestado otro golpe al siete veces campeón después de una carrera, en la que fue doblado por el Red Bull de Verstappen. «Ni siquiera pueden luchar por ganar a corto plazo», dijo convencido el alemán, señalando a un
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