Qué fue de Monica Bellucci, el icono de sensualidad que presume de heredera

Su trayectoria le avala, pero siempre ha tenido que combatir contra quienes la han encasillado como sex symbol que debe a esa imagen preconcebida el éxito de una carrera con muchos matices y aristas. Nadie puede negar que Monica Bellucci (57) es unicono de belleza, sensualidad y elegancia del mismo modo que es obvio que se trata de una mujer inteligente y con talento.

“Tengo casi 53 años y sigo trabajando, así que no creo que se trate solo de belleza. La belleza puede ayudar, pero la verdadera belleza es un estado mental. Si no eres hermosa por dentro, es difícil estarlo por fuera”, afirmaba la actriz a El País durante su visita en septiembre de 2017 al Festival de Cine de San Sebastián para recibir el Premio Donostia.

Y no le falta razón. Contra el recurrente cliché sobre su físico, que evidentemente también ha explotado, Bellucci contrapone una trayectoria profesional que habla de alguien que ha sabido aprovechar bien sus oportunidades y el momento. Con 16 años ya hacía sus pinitos como modelo y con apenas 25 daba el salto a la interpretación.

A lo largo de su dilatada carrera ha trabajado con las firmas más importantes del mundo de la moda y en su filmografía figuran numerosos éxitos. Y no solo nos referimos a blockbusters como Drácula, de Bram Stoker, The Matrix Reloaded, The Matrix Revolutions, La Pasión de Cristo o Spectre, entre otros, también a proyectos del cine europeo o de tinte más independiente como Malèna y la polémica Irreversible donde compartía cartel con el que fue durante 14 años su marido, el actor francés Vincent Cassel, del que se separó en 2013.

Tras su irrupción en el panorama internacional, podría haberse abandonado a las tentaciones de Hollywood y sin embargo optó por desafiar a la lógica y dibujar