¿Por qué en algunas comunidades se paga más IRPF y en otras se tributa menos en la Renta?

La correspondiente al ejercicio fiscal del año pasado está a la vuelta de la esquina. En menos de un mes, el próximo 6 de abril, se abre el plazo para ponerse al corriente con Hacienda. En dicho momento se podrá presentar la declaración del IRPF, de momento, únicamente de forma online. Para hacer lo forma telefónica o presencial habrá que esperar al 5 de mayo y el 1 de junio, respectivamente.

Como cada año, la presentación del balance financiero incluye alguna novedad. En este caso, viene en forma de subida del tipo estatal. Afectará solo a aquellos con rentas de más de 300.000 euros (hasta un 47%) y a los que ganen más de 200.000 euros al año (un 26%). Algo que repercutirá directamente, según las estimaciones del Ministerio de Hacienda, en unos 36.194 contribuyentes.

A la hora de calcular los diferentes tramos del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF), hay que tener en cuenta que este se divide en dos tipos: el estatal, que va a parar al Gobierno, y el autonómico, que va a las comunidades autónomas. Como resultado de ambos obtenemos el tipo total, que es lo que se acaba pagando de IRPF. Son, en total, seis tramos con un IPRF ascendente a medida que se incrementa la renta.

Si bien el tipo estatal se mantiene estable en todas las comunidades autónomas de España, el autonómico varía en función de cada territorio. Así, por ejemplo, podemos encontrar un 9,50% en Andalucía para el primer tramo (hasta 12.450 euros) y un 12% en Cataluña para su tramo inicial (hasta 17.707 euros). Son solo dos ejemplos, en los que cambian tanto el porcentaje como la cantidad que marca el final de un tramo.

¿Por qué ocurre esto? Es algo que aplican las propias comunidades, que imponen sus propios márgenes según la legislación vigente