Pogacar sentencia la general de Tirreno con otra exhibición
En 1973, Eddy Merckx empezó a decantar el Giro de Italia a su favor con su victoria en la cima del Monte Carpegna. Hoy, en la sexta etapa de el sucesor de El Caníbal hizo lo propio: (pichichi del año junto a Fabio Jakobsen) y sentencia total a la 'carrera de los dos mares', que conquistará oficialmente mañana por segundo año consecutivo. No lo necesitaba ante la falta de piernas (especialmente de Evenepoel) y ambición mostrada por casi todos sus rivales, pero Pogi es amante del espectáculo: ataque a 15 km de meta, gestión en el descenso y exhibición en solitario. Jonas Vingegaard amarró la segunda plaza de un podio que por segundo año consecutivo cerrará un bravo Mikel Landa, el único de los favoritos que hoy atacó al margen del prodigio esloveno. Enric Mas, cuando era virtualmente tercero, tuvo una fea caída en el último descenso que truncó sus ilusiones.
La fuga costó un mundo en formarse por el fuerte ritmo impuesto desde la salida. En los primeros veinte minutos de etapa se rodó a más de 51 km/h de promedio, una auténtica barbaridad. Después de múltiples ataques y contraataques se formó una escapada de nivel con corredores como Alaphilippe, Cosnefroy, Simmons y dos españoles, Lluís Mas y Aranburu. El pelotón levantó el pie del acelerador, hasta tal punto que el propio Aranburu se llegó a situar líder virtual de la carrera por más de 1 minuto de ventaja respecto a Pogacar. Una anecdótica ilusión...
<p dir=«ltr» lang=«en» xml:lang=«en»>✈️ Vola ! ✈️ flies away!Por muchas ganas que le pusieron, especialmente, Loulou y el corredor vasco del conjunto Movistar, su renta sobre el pelotón cayó en picado desde la aproximación al primer paso por el nevado Monte Carpegna. Cerca de la cima, no solo deberían hacer frente a duras