North Carolina reta a Kansas en la final del March Madness

Ya tenemos final del March Madness: North Carolina y Kansas se enfrentarán en la por reemplazar a Baylor en la cima del baloncesto universitario. Será en el majestuoso Caesars Superdome, el hogar de los New Orleans Saints de la NFL y uno de los grandes iconos de Luisiana tras acoger en sus entrañas a los refugiados del devastador huracán Katrina de 2005, que provocó 1.833 muertes. Entre ambos, suman 10 campeonatos de la NCAA tras la instauración de la Final Four en 1939: North Carolina acumula siete, tres en este siglo XXI y el último en 2017, mientras que Kansas atesora tres (1952, 1988 y 2008).

North Carolina llega a la final tras doblegar a Duke (77-81) en la gran rivalidad del baloncesto estadounidense. Y acabando antes de tiempo con la carrera de Mike Krzyzewski. Coach K deja el banquillo de los Blue Devils tras 42 temporadas, 1.097 victorias en 1.400 partidos, cinco campeonatos de la NCAA en 13 apariciones en la Final Four. Una mito que sobrepasó el baloncesto universitario para devolver la gloria a la selección de Estados Unidos con tres oros olímpicos consecutivos (2008, 2012 y 2016) tras el gran resbalón en Atenas 2004. Los Tar Heels ya arruinaron su último encuentro en casa, en Durham.

Dos golpes en los centímetros finales de su carrera que son pura alegría para los aficionados de los Tar Heels, que están a un paso (si no lo ha tienen ya) de aupar a un nuevo héroe histórico: Caleb Love. El base de 20 años, gran promesa para el próximo draft de la NBA, cerró la semifinal contra Duke con 28 puntos. Nadie en North Carolina había alcanzado esos guarismos en una Final Four desde James Worthy en 1982. Palabras mayores para un jugador que ha disparado su valor en el mercado de novatos en este último tramo de temporada: