Mané ilumina la Generation Foot
Sadio Mané fue el gran protagonista de la victoria de Senegal ante Cabo Verde por 2-0, en los octavos de final de la Copa de África, que tuvo absolutamente de todo. Los de Aliou Cissé vencieron a un rival que se quedó con nueve por las expulsiones de Andrade y Vozinha. El portero caboverdiano fue expulsado por un choque precisamente con Mané en la frontal del área que dejó aturdido al delantero del Liverpool, que pidió el cambio nada más anotar el 1-0 y todavía falta por ver si el golpe puede dejarle sin disputar los cuartos de final.
El crack senegalés, antes de convertirse en una estrella emergente, fue uno de los grandes abanderados de la prestigiosa Generation Foot, un equipo de Senegal que ha dotado al Metz de grandes jugadores a lo largo de la última década. El de Mané es el caso paradigmático, pero a ellos hay que añadir a jugadores como Ismaïla Sarr, estrella del Watford, Diafra Sakho, delantero que llegó a brillar en el West Ham o Pape Matar Sarr, mediocentro del Metz que fichó en verano por el Tottenham a razón de 16 millones de €. Koulibaly, central del Napoli, también pasó por el conjunto de la Mosela, pero no llegó directamente de la Generation Foot.
La Generation Foot es el equipo que dota al Metz de las principales joyas del fútbol senegalés. Cualquier club, por muy grande que sea, no puede llevarse a ningún jugador del conjunto de Senegal, pues el Metz tiene preferencia absoluta al haber firmado un convenio con la Generation Foot en el que se compromete a dotarle de medios suficientes para desarrollar a los talentos a cambio del derecho de tanteo de sus talentos. Así llegó Mané al Metz, equipo en el que, por cierto, coincidió con Koulibaly y con el que llegó a descender a la tercera división francesa en una