La petición del entrenador a Alcaraz: "Que no abuse de las dejadas"

para analizar el último éxito de su pupilo Carlos Alcaraz, que este domingo se convirtió en el tenista más joven de la historia en ganar un torneo ATP 500 a sus 18 años, un hito que le ha hecho dar el salto por primera vez en su carrera al Top-20 del ranking ATP.

Ferrero hizo hincapié en el juego agresivo de Alcaraz, del que también destacó su voracidad sobre la pista. «Como le digo medio en broma, cuando huele sangre, es como un tiburón. Cuando tiene las oportunidades delante de él no titubea demasiado. Es mejor que las intente ganar con su juego y demostrando su potencial a que se le escapen. Su forma de jugar ayuda a intentar dominar todo el tiempo, a ir por los partidos. Es verdad que a veces le provoca algunos fallos, pero le da más alegrías que tristezas».

El técnico valenciano también dio importancia al trabajo físico que han hecho con Alcaraz para que pueda desplegar su mejor versión. «El trabajo físico con Alcaraz viene desde hace tiempo. Necesitaba una pequeña transformación a nivel físico viendo el nivel tenístico que tenía. Hace año y medio o dos sufría bastante cuando jugaba ante otros jugadores que le exigían bastante y le llevaban al límite y en el tercer set empezaba a sufrir. No pensábamos que muscularmente se pusiera muy grande. Le he dicho al preparador físico que ya está bien (risas). Es un jugador potente, que necesita tener un buen físico para moverse bien de piernas y en la academia han hecho un trabajo muy bueno con él y la transformación que buscábamos se ha cumplido. Ahora tenemos que intentar que se mantenga bien, fresco, motivado y, a partir de ahí, intentar desplegar el potencial que tiene».

Ferrero también destacó el cambio en el aspecto mental de Alcaraz y cómo el orden fuera de pista le ha