La Alemania de Flick resiste ante Países Bajos

Ocho meses después de caer en los octavos de final de la Eurocopa a manos de Inglaterra, Alemania puso a prueba en el Johan-Cruyff-Arena que puede volver a plantar cara a los grandes. Pudo caer en una gran segunda mitad de los locales, pero unos primeros 45 minutos de lo más esperanzadores de cara el Mundial provocaron que Flick siga invicto tras su noveno partido como sucesor de Joachim Löw en el banquillo de la Mannschaft. Los de Van Gaal, liderados por el talento de De Jong en la medular, supieron reaccionar en una segunda parte en la que pusieron sobre el asador todo el poderío que esconden en sus filas. Partidazo.

Después de diez minutos de mucho respeto y tanteo por ambas partes, fue la Mannschaft la que logró hacerse con el control en Ámsterdam. Era inevitable que Oranje lograra liberarse de la presión de los alemanes, pero las conducciones rápidas de Sané y Musiala hicieron recular a unos neerlandeses que terminaron entregando el cuero a la Mannschaft y terminaron pagándolo. Fue en el descuento cuando Musiala recibió en el área, su centro fue rechazado por la zaga y le cayó el cuero a Müller en el punto de penalti. No perdonó el del Bayern con su zurda.

Pudo sentenciar la tetracampeona del mundo nada más salir de vestuarios. Un gran envío del imperial Sané dejó a Raum en el área solo ante Flekken, pero el zurdazo del lateral del Hoffenheim se marchó alto. Mandaba Alemania. Muy a pesar de una volea de De Ligt que salió rozando el travesaño de Neuer. Los errores se pagan caros contra los grandes. Y lo puso a prueba Bergwijn con un cabezazo que volvió a poner las tablas en el marcador. Éste, incluso, hubiera podido reflejar la victoria neerlandesa si el VAR no anula un penalti de Kehrer sobre Depay que le pareció