Guedes oposita a ser el hombre de la final

Julián Burgos

Gonçalo Manuel Ganchinho, conocido en el mundo futbolístico como Guedes, tiene la final entre ceja y ceja desde hace mucho tiempo. Con su misil al Athletic clasificó al Valencia para la final pero en cuartos también fue clave para superar al Cádiz, marcando un gol. Pero su obsesión con la Copa viene de mucho antes. En la final de 2019, ante el Barcelona, Guedes tuvo dos ocasiones clarísimas, una a puerta vacía, que pudieron evitar el sufrimiento final a su equipo. Fue campeón pero se quedó con un regusto amargo de no ser protagonista. Encima en el Villamarín, el lugar donde explotó en España, con una actuación de época en una victoria (3-6) histórica del Valencia ante el Real Betis.

Porque el equipo verdiblanco es otra de las obsesiones de Guedes. El portugués ya le ha hecho cuatro goles, el equipo al que más junto al Villarreal. Hoy quiere desempatar y levantar su segunda Copa, esta vez en La Cartuja. Sería un título que podría oler a despedida. En verano Guedes saldrá al mercado y seguramente un grande pujará por él dejando en las arcas del Valencia una gran cantidad de millones. Quizás no tanto como los 40 que pagó Lim por él en el verano de 2018. Pero una gran actuación hoy podría disparar su cotización. Llega con un pequeño esguince cervical. Pero no se perderá el partido a no ser que el dolor sea inaguantable. Hoy es el día G. El día de Guedes.

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