El Granada no cumple y baja
GRANADA-ESPANYOL
Un drama. Así acabó el partido en Los Cármenes. El Granada llegaba como el mejor situado para conseguir la salvación, pero no hizo los deberes. Tenía que ganar para lograr mantenerse, sin más, sin mirar al resto de campos. Pero el Espanyol cuajó un buen partido ante un conjunto nazarí al que pesaron los nervios y la presión. Incluso llegó a fallar un penalti en las botas de Jorge Molina. Una tarde que empezó de fiesta acabó en drama. El Granada regresa a Segunda División...
El Granada salió queriendo resolver su salvación en su campo. Sin mirar a otros. Sin sufrir por lo que pase en otros campos. Ese ímpetu, de inicio, funcionó. Suárez no llegó a un balón franco, Puertas, tras un robo arriba, se encontró con el paradón de Molina y Vilhena evitó el remate de Suárez. Sin embargo, con el paso de los minutos y el balón sin entrar, el Granada se diluyó. Poco a poco el Espanyol fue haciéndose con la posesión y a llegar al área de Maximiano. El portero tuvo que evitar el gol de Melamed. Los nervios atenazaban las piernas de los nazaríes y los pericos tampoco terminaban de buscar la portería granadina. La noche se seguía torciendo a la media hora cuando Milla, el timón del equipo se lesionó. Otro hándicap a un equipo que le estaba pesando y mucho la presión de jugarse el descenso. Melamed hacía daño y tuvo Maximiano que evitar el gol del canterano, Petrovic también interceptó un gran avance suyo. Y, en la recta final, volvió a renacer el Granada con una falta peligrosa y otro tiro de Molina que Diego López atrapó.
Tras la reanudación, el gol de Mallorca atenazó aún más si cabe las piernas. El Granada seguía vivo, pero por poco. Y el Espanyol era el que tenía el balón, llegaba al área rival y tenía las mejores