El enigma Pogba

Paul Pogba lleva una nueva expresión. Está tranquilo. Su contrato finaliza en verano, y aunque no se descarta su permanencia en Old Trafford, el galo tiene varios pretendientes, tanto en Europa como en la misma Premier League. The Telegraph explicó esto mismo la semana pasada. Pogba ha decidido aparcar cualquier tipo de negociación sobre su futuro hasta el final del curso. Su objetivo más inmediato pasa por recuperar la forma después de la lesión que sufrió en noviembre. Después de 85 días, el centrocampista regresó al equipo, y desde entonces ha sido una de las notas positivas de un Manchester United demasiado irregular.

Está seguro con el balón en los pies. Cuesta arrebatárselo. Protege bien y tiene el talento para escaparse en espacios pequeños. Rápido de mente y de pies. Conduce. Pisa área. Llega a posiciones de remate y produce. Marcó en su regreso frente al Burnley, si bien los suyos no pudieron pasar del empate frente al colista hace dos semanas. Asistió también la pasada, contra el Brighton, en la primera de las dos victorias de los mancunianos antes de visitar Madrid. Si quieren superar los octavos de final de la Liga de Campeones por primera vez en cuatro años, necesitarán lo mejor de Paul Pogba.

Pero es una incógnita. Como lo ha sido durante su segunda etapa en Old Trafford. Otrora canterano del Manchester United, regresó al club inglés en 2016. Fue el fichaje más caro de la historia en su momento, pero no cumplió con las expectativas. En 2012 se había marchado gratis a la Juventus, y su apuesta parecía acertada cuando los turineses alcanzaron la final de la Liga de Campeones. Cayeron derrotados frente al Barcelona, comandado por Leo Messi, Neymar y Luis Suárez en Berlín en 2015. Con 21 años, Pogba tenía el