El Chelsea se apiada del United

No hubo manera. El equipo de Thomas Tuchel controló el partido, lo manejó a su antojo y dispuso de innumerables ocasiones. Sin una necesidad real de sumar puntos, pues los londinenses tienen un puesto en la próxima Champions League prácticamente confirmado. Sumano ocho puntos más que el Tottenham, quinto, a falta de cinco jornadas. Deberían ser más, el Chelsea no pasó del empate contra un Manchester United que, ciertamente, está a otra cosa. Pensando en la próxima temporada. En los alrededores de Old Trafford, las bufandas ya llevan la cara de Erik ten Hag, no de Ralf Rangnick.

El técnico neerlandés tendrá trabajo. Llegará a un vestuario que parece haber perdido las ganas de todo. De jugar, de competir y de vivir. Aún así, los red devils aguantaron las acometidas de un Chelsea que tampoco atraviesa su mejor momento. Es probable que varios jugadores tengan la mente puesta en un futuro lejos del club, como Antonio Rüdiger o Andreas Christensen.

Hubo que esperar una hora para que los visitantes abriesen la lata. Reece James provocó el enésimo saque de esquina desde la derecha. El propio James cazó un rechace y tuvo todo el tiempo del mundo para colgar la pelota nuevamente en el área. Havertz prolongó y Marcos Alonso anotó el que pareció ser un gol definitivo. Nada más lejos de la realidad. Contra pronóstico, el Manchester United empató solo dos minutos después. Matic recuperó un balón suelto, perido por Kanté, y se lo entregó a Cristiano Ronaldo. El portugués, como viene siendo habitual durante toda la campaña, sacó las castañas del fuego. Batió a Edouard Mendy para rascar un punto que le mantiene todavía en la pelea por el último puesto que da acceso a la próxima Premier League. Un punto que vale también para poner punto