El año soñado de Jesús Owono

No corren buenos tiempos por Vitoria. Por mucho que el club, el entrenador y los jugadores se empeñen en mandar mensajes de ánimo de cara a la permanencia en Primera, lo cierto es que la afición ha perdido la confianza en el equipo de Julio Velázquez. Las matemáticas muestran todavía opciones de mantenerse pero las sensaciones son otras.

Mientras tanto, llegan las buenas noticias en otros frentes de la entidad. Las Gloriosas de Mikel Crespo firmaron la semana pasada la permanencia en la Liga Iberdrola a pesar de perder contra el Real Madrid. La derrota del Eibar en el campo del Granadilla otorgó a las chicas del Alavés femenino la posibilidad de continuar en la máxima categoría un año más.

Las alegrías también han llegado desde el filial, que sube de Tercera Federación a Segunda. El año pasado, entre los malos resultados y la reestructuración del fútbol español, perdieron dos categorías de una tacada. Ayer ganaron 4-1 al Anaitasuna de Azkoitia y firmaron el ascenso directo sin tener que esperar a los resultados del Portugalete, su principal rival este año.

En ese equipo está el portero Jesús Owono. De origen donostiarra, ha firmado un año de ensueño: internacional con Guinea-Ecuatorial, destacado en la Copa de África, debutando con la primera plantilla del Alavés en Primera y, ahora, protagonista incuestionable en el ascenso de categoría. Un guardameta que entrena con la primera plantilla y que, seguramente, dará pronto el salto al primer equipo.

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