Doncic apabulla a Chris Paul y los Mavs sueñan con la remontada
Gana Doncic, ganan los Mavericks. Primera victoria de la eliminatoria para el equipo de Texas, que ganó ante su público un partido muy típico de playoffs: vuelta a casa, apoyo tremendo de la afición, mucho acierto en medio de la fantasía y un ambiente sobrecogedor para un rival muy fallón. Con los deberes hechos, será el cuarto asalto el que decantará una eliminatoria que pueden casi sentenciar los Suns, o dar una emoción extra e inesperada los Mavs. De momento, 2-1 y menos de 48 horas para un nuevo desafío (mañana a las 21:30, hora española), en uno de los partidos, objetivamente, más importantes de la historia reciente de la entidad de la que es dueño Mark Cuban. Y un tiempo pequeño para disfrutar del buen sabor de boca que deja un encuentro dominado desde la defensa, en el que han tenido ventaja desde el primer cuarto y en el que todos han estado involucrados.
En el todo o nada para los Mavs, Phoenix dio el primer golpe y empezó con ventajas de 9-3 y 13-7, pero pronto los locales remontaron para ponerse 13-20 y no perder ya el liderato en el resto del encuentro. Había que hacerse fuerte en casa, fortalecer las virtudes, cambiar los emparejamientos, explotar los pocos defectos del rival (uno que ha ganado 64 partidos en regular season, que nadie se olvide) y asustar con la presión ambiental en un lugar en el que soñar es gratis. Los Mavericks no tienen nada que perder y jugaron, además, como si tuvieran mucho que ganar. Y ahora solo queda un nuevo asalto en el que los Suns reaccionaran, a buen seguro, con sabiduría, y Monty Williams corregirá la inseguridad con el balón (hasta 17 pérdidas) y el pésimo partido de Chris Paul, que pasó de sentenciar a sus rivales en el segundo encuentro a ser un mero ente en el tercero: 12