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FINAL CHAMPIONS LEAGUE

París alumbró una rivalidad cuya próxima batalla se libra de nuevo en la Ciudad de la Luz. La capital francesa albergó en 1981 la final de la Copa de Europa que enfrentó en el Parque de los Príncipes (ahora será en Saint-Denis) a dos gigantes de la competición. Un Liverpool que cuatro años antes había comenzado a escribir su historia como estandarte del país que inventó el fútbol (los reds con el equipo inglés con más títulos: seis) y un, que se postulaba para reconquistar su trono 15 años después. Ganó el Liverpool y el Madrid tardaría 17 más en resucitar su idilio con la Copa de Europa y otros 20 en cobrarse la revancha con el Liverpool.

Seis enfrentamientos (la final será el noveno partido oficial entre ambos) quizás sean una cifra exigua para elevar los Madrid-Liverpool a la categoría de clásico que sí pueden tener otros rivales de los blancos, como el Bayern, la Juventus o el Milan, pero la magnitud de los partidos en los que se han visto las caras hacen digno a este duelo de tal condición. Porque serán, además, los primeros equipos que se enfrenten por tercera vez en una final de la máxima competición continental.

Quien golpea primero, golpea dos veces. Y así hizo el Liverpool. Los reds conquistaron su tercera Copa de Europa a costa del Madrid por la mínima. Un gol de Alan Kennedy, que batió a Agustín en el minuto 82 de la final, privó del título a la generación de los Santillana, Juanito, Del Bosque, Camacho… El fútbol negó a los blancos la ocasión de vengarse hasta los octavos de 2009, pero se volvió a imponer el Liverpool (0-1 en el Bernabéu y 4-0 en Anfield).

Fue el Madrid de Ancelotti el que escribió la primera página de la revancha, en la fase de grupos de la 2014-15, cuando los blancos se