Bustos quita peso de su mochila

Nahuel Bustos es ese ángel y demonio que tiene a la afición del Girona pendiente en cada encuentro. Su capacidad de sacrificio y trabajo son tan encomiables como la facilidad con la que llega a poner nerviosa a la hinchada cuando no está acertado de cara a portería. El delantero cedido por el Manchester City en el Girona (es su segundo curso seguido en la entidad rojiblanca) ha escuchado en más de un duelo el runrún de la grada, pero el pasado domingo ante el Lugo logró reivindicarse. y ello le permite ganar confianza y quitarse presión de encima.

Bustos tiene la confianza de Míchel y sus compañeros y contra el Lugo fue el elegido para suplir a Stuani. La sombra del uruguayo es alargada, pero Bustos trata de aprovechar cualquier oportunidad que se le brinda. Tendrá mejor o peor fortuna, pero lo que no negocia es el esfuerzo. Tras el tanto logrado ante el Lugo ya lleva cinco (más una asistencia) en Liga en los 947 minutos que ha jugado (tiene una media de un gol cada 189') y se espera que hasta el final de temporada sea un poco más decisivo. "Estoy contento porque pudo entrar el gol y sirvió para que el equipo se llevara un punto. Creo que todos hicimos muchas cosas buenas y hay que continuar", explicó un Nahuel Bustos que desea que ese tanto contra el Lugo sea un nuevo punto de inflexión en su campaña.

En este mercado invernal, el Girona está tratando de atar a un delantero pero no está siendo sencillo. Los jugadores que han sido ofrecidos a la dirección deportiva gerundense no acaban de convencer a Míchel y ya se empieza a deslizar que quizás no aterriza ningún '9' puro capaz de jugar al espacio en Montilivi. Nahuel Bustos está tranquilo y Míchel tiene claro que se trata de un futbolista muy aprovechable y del que puede