Bordalás sigue a la espera y el club estrecha el cerco a Cömert
y han salido dos o tres. Este equipo necesita ayuda. Si no nos reforzamos nos va a costar competir. Vamos muy justos, con muchos problemas". La reflexión es de Bordalás, técnico del Valencia, quien hace meses (concretamente desde que Paulista recayó por primera de vez de su lesión)
Sin embargo, a 23 de enero, con sólo una semana de mercado por delante, no ha llegado nadie. No sólo eso sino que ha perdido a Wass, por diversas circunstancias, desde que se conoció el interés del Atlético por ficharle. No ha llegado tampoco un mediocentro y se le ha caído el más utilizado. Aún así, el Valencia ha hecho dos partidos aceptables ante dos de los grandes, Sevilla y Atlético, en las dos últimas jornadas.
Todo ello podría estar motivado por las circunstancias del mercado pero lo cierto es que, una vez que el club ha realizado varios movimientos realmente contradictorios, al menos de puertas para afuera.
El central de consenso debía reunir las siguientes características: cedido sin coste, por un lado; y fuerte, con poderío aéreo y, sobre todo, que conociera LaLiga para que el rendimiento fuera inmediato. Sin embargo, lo que el club tiene ahora más cerca es el fichaje del suizo Eray Cömert. Ni sería cedido, ni gratis y de ninguna manera conoce LaLiga española. Podría ser un central con futuro y una oportunidad de mercado pero cuando llegue alguien debería reconocer que el tiro ha cambiado. De hecho, el central suizo, si nada se tuerce, sería el primero de los fichajes. Algunas fuentes aseguran que el acuerdo entre clubes es un hecho y el suizo llegará en las próximas horas a Valencia para pasar el reconocimiento médico.
A todo esto, Bordalás sigue enrocado en que el club debe decidir en materia de fichajes y él está apartado de ese


