La carrera de avanza desde hace tiempo en progresión ascendente. De manera inexorable, la española, asentada en la élite, rompe barreras, derriba puertas casi en cada torneo en el que juega. Este domingo ganó a Yulia Putintseva por 6-3 y 6-2 en 81 minutos y alcanza por primera vez los octavos de final del en su sexta participación. Su mejor resultado hasta ahora era la tercera ronda a la que llegó en 2015 y este mismo año. Además, virtualmente es la número tres del mundo, su mejor puesto. Y lo bueno es en que en el torneo de Florida no ha llegado aún a su nivel más alto, tiene margen de mejora y probablemente tendrá que elevarse para poder el lunes con , el nuevo prodigio del tenis checo, que con sólo 16 años le pintó la cara a la ex número uno Victoria Azarenka, hasta el punto de que esta abandonó la pista sin dar explicaciones ni ser atendida por el fisio cuando perdía por 6-2 y 3-0. «Vika, tenemos que esperar», le dijo la jueza de silla. Ante esa advertencia, la bielorrusa ni siquiera se giró mientras salía y no se despidió de su rival.