La invasión de Rusia a Ucrania puede tener consecuencias en la carrera deportiva de Nikita Mazepin. El asiento del piloto ruso, que el 2 de marzo cumple 23 años, peligra en un contexto de sanciones internacionales. Para empezar, porque su pasaporte puede ser un impedimento para cruzar fronteras o entrar en Reino Unido, donde se encuentra la fábrica de la escudería Haas. Pero sobre todo porque el contrato de patrocinio de la empresa de fertilizantes Uralkali, propiedad del padre de Nikita, puede verse alterado en las próximas semanas si Haas quisiera rechazar una vinculación directa con los oligarcas rusos.