La venta del Chelsea sigue sin concretarse, y a la espera de un nuevo dueño, el club “está con las manos atadas”. Así lo describió Thomas Tuchel, el entrenador, que al igual que sus jugadores, vive con preocupación la situación del equipo blue, según ha adelantado The Times. El Chelsea tiene prohibido firmar nuevos acuerdos por la sanción del gobierno británico, lo que ha dificultado enormemente las negociaciones para renovar a jugadores clave como Andreas Christensen o Antonio Rüdiger. Dos defensas que terminan sus contratos este verano y que se marcharán de Londres.