Noche grande para los que viven como suya la NBA. LeBron James culebreó siendo game-time decision, pero finalmente se puso las zapatillas para disputar el segundo partido de este back-to-back contra equipos de la Conferencia Este. Se especulaba con que querría reservarse no sólo físicamente sino para el hito que estaba a punto de conseguir. Otro más. Estaba a tiro de batir a Karl Malone en puntos y superarle para ser el segundo máximo anotador de toda la historia de la regular season de la NBA y el siguiente partido a este de Washington D.C. se disputará en Cleveland, la casa que le encumbró como jugador y persona. No hubo reservas y James ingresó en el parqué del Capital One Arena para jugar contra los Wizards. Necesitaba 19 puntos para llegar a la altura de Malone y metió 38, el doble.