Volvió a cambiar la eliminatoria y las sensaciones ligadas a la misma. El Heat-Sixers está siendo un vaivén de emociones que empezó con un 2-0 que parecía inapenable para Miami, y se quedó luego un 2-2 que daba esperanzas a los Sixers. Otra vez, la serie se transforma y ahora son los Heat, con todo merecimiento, los que parecen máximos favoritos. Por una parte, porque han arrollado a sus rivales con una incontestable victoria por 35 puntos y en un partido dominado de principio a fin. Por otra, porque tienen una última bala en Florida en caso de caer en el sexto encuentro, y con un regreso a casa para un hipotético séptimo, un lugar en el que permanecen imbatidos en estos playoffs (6-0 hasta ahora). Muy de cara, por lo tanto, las cosas para unos Heat que podrían volver a las finales de Conferencia por primera vez desde la burbuja de Orlando y por segunda desde tiempos de LeBron James y compañía. Y en esa ronda, claro, también tendrían ventaja de campo. Ya sea contra Celtics o contra Bucks.