El increíble bonus de Dinwiddie: un dólar por ser campeón de la NBA
Spencer Dinwiddie es una de las piezas importantes en la rotación de Dallas Mavericks, el sorprendente finalista del Oeste que entrena Jason Kidd y dirige en pista Luka Doncic. El escolta, de 29 años, ejerce de tercer guard por detrás del esloveno y Jalen Brunson: minutos muy importantes desde el banquillo y en el quinteto en cuanto hay una baja por lesión. Su encaje, que muchos veían complicado, ha resultado óptimo por ahora desde que antes del cierre del mercado invernal, en febrero, llegó a Texas procedente de Washington Wizards. Viajó con el tirador Davis Bertans y una segunda ronda protegida a cambio de Kristaps Porzingis, en el que los Mavs habían dejado definitivamente de creer y por el que, se pensó, no había mejores ofertas que cuadraran con su salario que la combinación de los dos jugadores que llegaban desde la capital.


