Con el proceso de venta ya concluido, y con Todd Boehly como nuevo presidente, el Chelsea encara la ventana de fichajes con muchas tareas pendientes. Un portavoz del gobierno, de hecho, anunció que la sanción al club queda revocada: "El cambio de propiedad de hoy marca un nuevo capítulo para el Chelsea en el mejor interés de sus fans, el club y la comunidad futbolística en general. El club ahora ya no está sujeto a las sanciones impuestas a Roman Abramovich, un individuo que ha permitido la invasión brutal y bárbara de Ucrania por parte de Putin".