Por dos veces fue preguntado por el incicdente de la curva 1, tras la salida, en el que Nakagami entró pasado y se llevó con él al suelo a Bagnaia y Rins. Se podrá estar o no de acuerdo con el francés, pero da gusto verle en el papel de campeón, de referente de la parrilla. En este caso, además, el tirón de orejas para el japonés fue de los importantes, recordándole que «se pueden matar». Ah, y también tuvo para el panel de comisarios que capitanea Freddie Spencer, del que ha dicho, por la no sanción al piloto de Honda, que «es demasiado viejo» para ejercer ese rol. Calificaron la acción como lance de carrerai sin sación para el nipón, que pasó la noche en el hospital, en observación, pero sin fracturas. Al que sí escayolaron con fractura en la muñeca izquierda fue al español.