Vitolo, una cesión fantasma

Vitolo decía adiós a la temporada 2020-21 con una sensación agridulce. El canario se proclamaba campeón de Liga por primera vez en su carrera y alcanzaba los 100 partidos con el Atlético para ganarse un espacio en el Paseo de Leyendas del Wanda Metropolitano. Sin embargo, su papel fue completamente secundario.

Únicamente 59 minutos desde marzo y participación en tres de los 16 últimos partidos del curso en los que estuvo disponible. Y Vitolo pidió salir en busca de volver a sentirse importante en un equipo. “Es una temporada que apenas he contado para el míster. Un año difícil, todos queremos jugar, ser partícipes de los objetivos del equipo y este año no he podido jugar lo que quería. El equipo estaba muy bien y era difícil encontrar un hueco. Me voy con la satisfacción de haber ganado la Liga. Se hablará con el míster y con el club y a ver qué ideas tienen ellos. Me da igual donde, quiero sentirme importante y feliz. Si es en el Atleti mucho mejor y si no, a ver qué opciones hay”, explicaba durante el verano en El Deportivo, de Canarias Radio.

Y esa oportunidad llegó en forma de una cesión al Getafe. Vitolo afrontaba su último año de contrato como rojiblanco, por lo que para poder jugar de azulón, que se hacía cargo de una parte del sueldo. Pero, como si de un deja vu se tratase, el curso de Vitolo parece encaminado de nuevo al ostracismo. Las lesiones han vuelto a castigar el canario, que tampoco ha brillado cuando ha estado disponible. Y esto le lleva de nuevo a la casilla de salida.

Vitolo ha participado en siete partidos en lo que marcha de temporada y acumula solamente 216 minutos. Su única titularidad se produjo en la segunda jornada de Liga contra el Sevilla, donde fue sustituido en el descanso, y desde entonces