Un Baskonia en cuadro tropieza en Atenas ante el Panathinaikos

FINALIZADO

El partido del OAKA comenzó con dos noticias terribles para el entrenador croata del Baskonia: Costello sufrió un esguince de tobillo y quedó descartado para el choque al igual que Alec Peters, Arturs Kurucs y Tadas Sedekerskis, que ni siquiera habían viajado debido al coronavirus. La rotación interior ya era muy corta de por sí tras la salida de Nnoko al Burgos y, ahora, mucho más. La otra mala nueva fue la victoria del Lenovo en la cancha del San Pablo (73-81). Si los tinerfeños ganan en casa el domingo o si pierden por 8 puntos o menos, el Bitci Baskonia verá la Copa del Rey de Granada por televisión.

El Panathinaikos se aprovechó de la circunstancia y apretó los dientes desde el principio, tirando menos lanzamientos pero con mejores porcentajes. Ganaba 10-4 en el minuto 4, 16-4 en el 5, 18-4 en el 6 y 21-6 en el 8. Las únicas noticias buenas para Neven Spahija fueron los regresos a la cancha de Vanja Marinkovic (tras superar el COVID-19) y de Sander Raieste (había viajado para hacer grupo porque apenas tenía sesiones de entrenamiento con sus compañeros después de sus operaciones de menisco) pero las circunstancias obligaron a ello. El 22-8 del final del primer cuarto resultaba bastante ilustrativo. Derrotados muy pronto.

El Baskonia mejoró en defensa, frenó las pérdidas y empezó a equilibrar el rebote. Pero, con esas virtudes, sólo pudo firmar un parcial de 9-9 que, tras un 7-0, volvió a permitir la escapada local. Raieste jugaba de cinco, Enoch se cuidaba con las faltas y White, junto a Evans, se ponían las botas. El porcentaje de triples, al descanso era del 0 % (0/13) por lo que los jugadores se marcharon a los vestuarios con un contundente 38-20. Un Panathinaikos que ha entrado en barrena, que apenas