Real Madrid: Vinicius trae aire fresco

Sin Benzema, Vini. El brasileño tendrá que asumir el liderazgo ofensivo del Real Madrid en Vila-Real y recuperar un ataque que se atascó considerablemente la jornada pasada pasada contra el Granada por la ausencia de Karim… y del propio Vinicius.

La emergente estrella blanca ha hecho suyo el dicho tan español de que no hay mal que por bien no venga. Se perdió el encuentro frente a los nazaríes por acumulación de amonestaciones pero eso le sirvió para tomar un respiro. Necesario porque venía del esfuerzo de empalmar los partidos con Brasil y el de San Mamés en Copa y eso multiplicaba las posibilidades de una lesión, pero y sobre todo al viaje a París del martes.

Un Vini fresco es una garantía para Ancelotti en la misión del italiano de recuperar el mordiente perdido en los dos últimos partidos en los que se notó la ausencia de Benzema. Ese único (pero trascendental) gol de Asensio al Granada evitó una semana de martirio para el técnico y el equipo. La alegría de Vinicius regresa para revitalizar a su equipo y también para amenazar el sistema de Emery.

Para el propio Vinicius es un acicate personal porque el Villarreal es un hueso para él desde que llegó al Madrid. En sus siete enfrentamientos contra el submarino amarillo estuvo discreto: ningún gol o asistencia. Eso no le ha pasado con ningún contrincante de LaLiga al que se haya medido tantas veces. Por ejemplo, a Athletic y Atlético no ha logrado marcarles, pero sí ha dado pases de gol (una vez contra los leones y tres en sus Derbis) contra ellos.

Pese a ese descanso forzoso contra el Granada, el nuevo papel estelar de Vinicius le está llevando a niveles de exigencia que no conocía. Ahora mismo está a sólo 178 minutos de superar en este curso todo lo que jugó en el pasado,