Real Madrid | Calma... y luego tormenta

Antes de la tormenta viene la calma. En esa tesitura se encuentra el Real Madrid tras el varapalo del Clásico. Normalmente, los parones de selecciones son el envoltorio del virus UEFA que tanto afecta a los grandes. En cambio, en esta ocasión, el equipo blanco puede utilizarlo como bálsamo para curar heridas y llegar con las pilas a tope de cara al terremoto que el calendario esconde. Al regreso de los internacionales, que han partido a defender los colores de sus respectivos países a partir de este lunes 21, a los de Ancelotti les esperan 15 días de auténtica locura: Celta (2 de abril) y Chelsea (miércoles 6) en Vigo y Londres; Getafe (9 de abril) y vuelta de Champions frente a los blues (martes 12) en el Bernabéu; y visita al Pizjuán el día 17, donde puede darse un zarpazo definitivo a LaLiga. 

A la vuelta a los entrenamientos este miércoles, Carletto ha tenido que tirar de cantera para completar una práctica razonable, con Benzema y Mendy trabajando al margen, recuperando el tono en el gimnasio y siguiendo sus procesos de recuperación respectivos. El goleador, aquejado de problemas en el gemelo izquierdo, y el lateral, lesionado del abductor, no pudieron estar ante el Barça, pero se les espera de vuelta ante los celestes. Kroos, que ha confesado que tras la entrada de Aubameyang al comienzo del choque, fue sustituido en el descanso. Pero, tras haber padecido de los isquiotibiales en las últimas fechas, despejó cualquier duda cuando saltó a Valdebebas con el resto de sus compañeros.

La calma pretormenta de la que hablábamos la personifica este trío. Ni Kroos, ya retirado de la Mannschaft, ni los franceses tienen cita con sus selecciones, de manera que podrán aprovechar estas casi dos semanas para preparar sus cuerpos de