Premier League | Arteta devuelve la esperanza al Arsenal

La historia se repitió. Cuatro entrenadores tuvieron que pasar por el banquillo de Highbury hasta dar con alguien capaz de lograr éxitos similares a los que el Arsenal logró bajo la batuta de George Graham. Ese alguien fue Arsène Wenger. El francés ofreció una nueva identidad al equipo, un juego más vistoso y trepidante. Pero sobre todo efectivo. Los gunners se acostumbraron a ganar. De echo es el único equipo en haber conquistado la Premier League sin perder ni un solo partido partido, de ahí que al equipo formado por Thierry Henry, Patrick Vieira o José Antonio Reyes se les conozca como los Invencibles.

No fue una despedida placentera la de Wenger. Parte de la afición del norte de Londres agradecía sus servicios y trataban de disfrutar de sus últimas tardes con él. Otra parte del graderío miraba ya al futuro. Como ocurrió a principios de los 90, el Arsenal masticó y escupió al primer entrenador en pretender tomar las riendas de un equipo exitoso venido a menos. Unai Emery duró 18 meses en el cargo. Tras un breve paso de Frank Ljungberg como entrenador interino, llegó el turno de Mikel Arteta.

Otrora capitán del equipo, el donostiarra conocía bien al club. Tras una carrera de 14 años como futbolista, saliendo de la cantera del Barcelona y vistiendo las camisetas de equipos como el PSG, la Real Sociedad o el Everton, colgó las botas en 2016 después de cinco años en el Arsenal. Y se sentó en el banquillo. Ese mismo verano llegó al Manchester City para ser asistente de Pep Guardiola. Arteta conocía la Premier League al detalle. Sus equipos, sus aficiones. En el norte de Inglaterra siguió estudiando, mejorando. Atendió a la llamada del Arsenal en 2018, aunque fue Unai Emery quien aterrizó en el Emirates Stadium. Un año más