Madrid-Barça: cuentas pendientes y el liderato en juego

El Madrid-Barça de hoy es a priori el menos trascendente de la temporada, aunque luego puedan añadirse capítulos significativos, incluso inesperados. ¿Y por qué no es tan decisivo? Porque no es una final y el liderato en la Euroliga ofrece menos recompensa que el de la ACB, donde la ventaja de cancha en todo el playoff puede suponer el título. En Europa, el reto es acabar entre los cuatro primeros, lo que garantiza el factor pista en cuartos. Y ahí los dos grandes lo llevan muy bien, con cinco derrotas menos los blancos (y cuatro los azulgranas) que el quinto, el Zenit. Más allá, el cruce del primero no siempre es más sencillo que el del tercero, por ejemplo.

Ambos arrastran, además, lesiones y podrían verse en la final de la Copa en nueve días, así que es lógico que los entrenadores, si aún pueden sacar un as, se lo guarden en la manga. Quizá no fuercen ni situaciones ni a sus jugadores. El Madrid recupera a Heurtel y Hanga, «entre algodones», pero no a Taylor y Deck, dudas para la cita de Granada. . Peligra para él el torneo del KO. En el Barça, Abrines aún no regresa (aunque ha viajado), tampoco Oriola, y Higgins se opera.

Hasta aquí, la fría lógica. Luego queda la calentura de un Clásico con cuentas pendientes y un liderato en juego que nadie quiere ceder al enemigo. Desde que Jasikevicius entrena al Barça, y ojo a esto, manda en los duelos directos por 8-3 y ha ganado todos los disputados en el WiZink (5-0). Otro triunfo, ante un equipo debilitado por el calendario y los problemas físicos, podría dejar tocado a su rival en vísperas de la Copa. A un Madrid que viene de batir récords negativos en su larga historia en la Copa de Europa (17 puntos al descanso ante el Fenerbahçe y 30 al final del tercer cuarto) y que, en