LaLiga Santander | Los eneros negros de Moreno

Las entradas de año no le sientan bien al de Massanassa, que en este 2022 todavía no ha ganado con el Espanyol en LaLiga (un empate y dos derrotas) y ha quedado apeado de la Copa del Rey. Un año que había empezado con la dulce resaca de la victoria, el 31 de diciembre, ante el Valencia, la primera fuera de casa, pero que en apenas tres semanas y media se ha convertido en una penitencia.

El balance del técnico valenciano desde la campaña 2014-15 en el Nàstic es de 10 victorias, seis empates y 11 derrotas en este enero, un balance que, en las cuatro últimas campañas, es más preocupante: tres victorias, dos empates y nueve derrotas. Ya sea por la incertidumbre de los mercados, por la planificación física y por las casualidades que entran en el juego, la racha del técnico viró a partir de la campaña 2017-18.

En aquella temporada dirigió al Mallorca en Segunda B. En enero, pese a ganar dos partidos y empatar el tercero, perdió el primer encuentro de la temporada. Ascendieron los bermellones, como el curso siguiente, en el que enero también fue el mes más perjudicial. Consiguieron una victoria, un empate y dos derrotas, y acabaron el mes como octavos a tres puntos de la sexta plaza que daba acceso a jugar el playoff.

El siguiente curso, ya en Primera con un Mallorca que descendió, el equipo balear ganó un partido y perdió otros dos, lo que les comportó quedarse solo un punto por encima de un descenso que fue inevitable. También con el Espanyol el curso anterior enero fue el mes de las dudas. El Espanyol perdió tres encuentros y ganó uno. Los blanquiazules despidieron 2019 con cuatro puntos de ventaja sobre el tercero, líderes de la competición, y cerraron enero en segunda posición empatados con el Almería, tercero.

El equipo de