Koke, contigo empezó todo

Kiko Narváez

Corría el minuto 94:04 de partido cuando, tras otra pérdida de pelota rojiblanca, los futbolistas del Espanyol salían en transición rápida con un Darder (jugadorazo) que se relamía tras encontrarse un balón con ventaja en el borde del área. Las pulsaciones subieron en el Metropolitano y los fantasmas parecían que de nuevo bajaban al verde cuando Koke, tirando de orgullo (ese plus lo da el sentimiento) se tiraba para cortar el disparo del espanyolista. Después, sí después, ya vino el saque de Oblak, el pase magnífico de Rodrigo de Paul y Carrasco, en una genialidad, sacaba el córner tras el que vendría la jugada del penalti.

En un encuentro plano, donde los dos equipos se controlaron y en el que faltó fluidez y chispa, algo lógico en los atléticos después del palizón ante el City, me dio la sensación de que tras el desgaste físico y mental de la Champions Simeone buscó en los cambios frescura y chispa después el descanso. Tanto Carrasco como Cunha dieron la razón al técnico argentino durante esos primeros 15 minutos con sus desbordes y su claridad arriba. Todo iba por buen camino hasta la expulsión y el error de Oblak en el gol del Espanyol. A partir de ahí, solo cabía la posibilidad de una acción talentosa para que el Atleti se llevase los tres puntos. Seguramente muchos se queden con las acciones de Carrasco, pero a mí me vais a permitir que me quede como regalo en el Día del Niño y Niña rojiblancos con la acción del canterano Koke, con su orgullo, pasión y compromiso en el 94:04 cortando el disparo de Darder. Gracias Koke, contigo empezó todo. El valor de los pequeños detalles. Orgulloso de verlo buscar en la reserva para ver si le queda un aliento más en beneficio de su equipo.

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