Esperando a Take Kubo

El 4 de diciembre de 2021, hacia las ocho y cuarto de la tarde y en el minuto 91 de partido, el que daba el triunfo a los baleares en el Wanda Metropolitano contra todo pronóstico. Los, si se tiene en cuenta que en su liga no todos los compañeros de viaje iban a ganar en el feudo rojiblanco.

Take Kubo, madridista de derechos y mallorquinista de préstamo, lo celebró por todo lo alto, aunque nunca dijo nada parecido a que esa celebración fuera por su particular miniderbi, y es que el japonés va a lo suyo sea quien sea el adversario. «Si con el gol he podido ayudar al Madrid, mejor aún», comentó con una sonrisa.

y, aunque apuntó cosas muy buenas al inicio de temporada, parece haber entrado en una fase de letargo. Marca poco y decide menos, pero siempre que tiene el balón en sus pies parece que va a pasar algo. Lleva un gol y medio (este medio tuvo la colaboración de Unai Simón) y una lesión que le impidió jugar durante ocho partidos.

El horario asiático también le espera (a él y Kang-in Lee) y quién sabe si se guarda lo mejor de sí para el Mundial de Qatar. En ese caso, clasificada Japón para la cita, a los nipones les ha correspondido el grupo en el que está España, así que mientras el mallorquinismo le espera y el Real Madrid no se sabe, lo cierto es que el próximo invierno será rival de todos.

Su bajo momento de forma le ofrece un reto: volver a marcarle al Atleti como ya hizo en la primera vuelta en aquella carrera en solitario culminada en el mano a mano con Oblak; quizá eso le ponga las pilas para ayudar al Mallorca a salvarse y en el futuro ya se verá, si en el Madrid, en el Mallorca o en Japón y contra España.

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