Elon Musk compra casi el 10% de Twitter y lanza pregunta: “¿Queréis un botón de editar?”

En un cameo en la lejana Iron Man 2 -que han pasado 12 años nada menos desde su estreno-,. Una década después, sus coches Tesla siguen buscando ser los referentes en conducción autónoma; su compañía Space X le fabrica los cohetes a la NASA después de enseñarle cómo podían superarlos con una tecnología que recupera el cohete y no lo deshecha. Y hasta ha fabricado el lanzallamas de la clase media con su The Boring Company.

A modo de ejemplo de su poder no sólo monetario, un tweet suyo en la Red basta para que una criptomoneda dispare su cotización de forma instantánea o una empresa vea bajar el precio de sus acciones. Y es que de hecho Twitter es una de las redes favoritas de Musk -y en la que se ha metido en varios líos también.

En 2018 tuiteó que había conseguido los fondos para llevar a Tesla a la bolsa si alcanzaba los 420 dólares por acción. Con el tiempo se supo que no había asegurado la financiación para la venta, y Musk se vio obligado por la Comisión de Valores y Bolsa a que los abogados de Tesla aprobaran previamente cualquier tuit sobre la salud financiera de la empresa, las ventas, las cifras de entrega, etc.

Y desde esta semana, Twitter es también otro de sus negocios, ya que Elon Musk ha adquirido el 9,2 de acciones de Twitter, lo que le convierte en el mayor accionista de la compañía. Tras el anuncio oficial, las acciones de Twitter se dispararon hasta un 27% después de que se revelara la compra de Musk el lunes en una presentación regulatoria. desde su primer día de cotización tras la oferta pública inicial en 2013.

La participación de Musk, que es casi un 10% de la compañía, tiene ahora un valor de unos 2.890 millones de dólares, según el cierre del mercado del viernes. Lo que significa que Musk es ahora 3 mil