El Madrid bate al Joventut en un pulso clave para ser segundo
FINALIZADO
En un pulso a tirones, en el que el Madrid mandaba y el Joventut respondía siempre subido a una defensa zonal que ejercía de catapulta, los dos únicos clubes que han disputado todas las Ligas, de la primera a la última, nos dejaron casi centenaria en anotación: 99-89. Una en la que Hanga rompió a encestar con 20 puntos y 5 triples, bien respaldado por la energía de Yabusele (17 y 3 robos) y el aprovechamiento intensivo de Poirier de todo lo que le caía cerca del aro (16 más 8 rebotes para 25 de valoración). Entre los dos interiores franceses agruparon 33 tantos sin errar un tiro: 14 de 14 en tiros de campo y 4 de 4 desde la personal. Difícil de ver, y de repetir.
Una batalla, decíamos, en la que Tomic dio una clase magistral de inteligencia y talento desde los postes: 11 de 14 de dos, 25 puntos. Fogonazos individuales en una carrera de equipos por imponer el ritmo, que estuvo más tiempo inflando la vela local. La victoria, la sexta seguida de los blancos entre la ACB y el playoff europeo, les da para quedarse con la segunda plaza y la ventaja de cancha en cuartos y semifinales. En este momento, un triunfo más que el Valencia más el average favorable a tres jornadas del final y dos más que el Joventut y también el desempate de su lado. Por arriba, aunque solo piense en rojo, el color del Bayern.
El partido tuvo dos partes en una antes del descanso. La primera, la de un Real con acierto y, sobre todo, ritmo donde Causeur y Hanga eran las alas. La de un bloque que rompía con sus penetraciones, que tenía buenos tiros abiertos y que cargaba con Yabusele cerca del aro. El primer arreón merengue lo atemperó la entrada de un certero Pau Ribas: 11 puntos en 8 minutos. Los de Laso dieron un nuevo tirón con su rotación: