El Atleti da otro 'pasillo' atrás

No había llegado el reloj al minuto y el campeón que había dejado de serlo, no había terminado de salir en San Mamés y ya se le torcía la tarde. Amarilla. Hermoso la veía por una entrada sobre Raúl García. Falta sí era, de tarjeta no. El Athletic salía con mentón levantado, alrededor de ese chico con el 22 a la espalda que entraba en el podio de partidos jugados en Liga, 550, 329 con la rojiblanca de Madrid. Los tiempos en los que volver a encontrarse con el Atleti eran una parálisis, la congoja, tantos recuerdos quedaron atrás. No había llegado el reloj al minuto y Atleti ya le llovía fuerte el Athletic en San Mamés. Como si la vida no le fuera en las cinco finales que quedan. Como si no se le hubiera descompuesto también eso, LaLiga de 14. El equipo del Cholo de nuevo, sólo cascotes a la deriva bajo el rugido de un león.

Simeone sólo podía mirar con envidia aquel jugador que fue suyo y que, indudable, se fue demasiado pronto, mientras Raúl García no dejaba de lanzar zarpazos sobre Oblak como cañonazos. El plan del Cholo, ese que llevaba una semana ensayando, día a día, para este partido, pronto fue sólo papel mojado en la hierba. Daba igual que hubiera regresado Herrera, que compartiera el pivote con Kondogbia, como Grizi con Suárez. Que Giménez también estuviera de vuelta y que Koke permaneciera en el banquillo. A los ocho minutos todos eran un negar de cabeza. Un chasquido de labidos. El lamento de Oblak. A la enésima de Iñaki Williams, que abría en canal al Atleti por la izquierda y a Giménez, chutó a portería. Hermoso fue a despejar pero el infortunio le rodeaba como un aurea: gol en propia puerta. No despertó el Atleti, sin embargo. Ni seis minutos más tarde, cuando Iñaki Williams, otra vez, recibía solo, le cogía