El 'abuelo' de Guardiola

El potencial de Bernando Silva es algo que se da por hecho. No es que destaque por su potencial físico, por altura  fuerza. Más bien es el callado de la clase, el menos extravagante pero con unas cualidades innatas. Y un trabajador insaciable. 

Sus compañeros bien lo saben. Jemerson (actual defensor del Metz), que compartió vestuario con él en el Mónaco, quiso elogiar a Bernardo Silva y hablar de su forma de ser, muy distinta al resto de futbolistas. «Le gustaba llevar ropa de viejo...».

"Él ya era muy diferente en el Mónaco. En los entrenamientos era aburrido marcarle. Te regateaba, en la recuperación pensabas que lo ibas a hacer, pero lo conseguía porque remataba muy bien o hacía un pase", admitió el brasileño.

«Tácticamente es muy fuerte porque se entrega al cien por cien al equipo. Tiene una visión de juego increíble, es muy habilidoso y lo da todo por el grupo. A pesar de ser una estrella, vuelve para ayudar al equipo. En el fútbol hoy en día todo el mundo necesita defender y él ya tenía esa característica desde que era muy joven. Aparte de su resistencia física, que es muy grande. Es bajito y marginal. No tiene mucha masa muscular, pero es resistente. Era uno de los muchachos que más corría durante los partidos”, elogió.

»Bernardo es un tipo muy agradable. La gente bromeaba mucho diciendo que le gustaba vestirse con ropa de viejo. Siempre se presentaba con una camisa de vestir…", admitió entre risas. De ahí que le pusieran un apodo que todavía hoy sigue: «Abuelo». Cuando llegó al Mónaco apenas tenía 19 años...

Gündogan ya lo había afirmado en otras ocasiones. “Bernardo era intimidado por todo el equipo porque la mayoría de los jugadores decían que se viste como si tuviera 40 o 50 años, o incluso como un abuelo. Pero