"Después de cómo acabó 2021, hay fuego dentro de Mercedes"

Hizo méritos de sobra para llegar a tenerlo antes, pero más tarde o más temprano el destino le tenía guardado a George Russell un asiento en Mercedes. Su sobresaliente rendimiento en sus tres años con el Williams pedía a gritos un monoplaza mejor dotado y, después de que los de Brackley dieran el paso de acabar su relación con Bottas, el británico ya lo puede saborear. Para empezar, confiesa que «es una sensación increíble ser piloto oficial de Mercedes… y un poco extraña al mismo tiempo».

«No hemos pasado mucho tiempo juntos, pero de alguna forma siento como si volviera a casa porque estuve como piloto júnior en F3 y F2», asegura Russell en su primera entrevista con el equipo de sus sueños, en la que explica cómo está siendo su adaptación: «Conozco a la gente desde hace mucho tiempo y me estoy poniendo al día de cómo funciona el equipo y el nuevo coche para prepararme lo mejor posible». Y avisa: «Después de cómo acabó el año pasado, hay mucha más motivación y fuego dentro de la fábrica para recuperarse».

Después de pasar «muchos días en la fábrica con los ingenieros y en el simulador» durante este invierno para familiarizarse con el coche «y tratar de dirigir el desarrollo» hacia lo que deben mejorar, el piloto de 23 años cree que iniciar la nueva era en un nuevo equipo es una buena combinación: «Empezar desde una hoja en blanco es beneficioso para todos. Si hubiera seguido en Williams, hay cosas que has aprendido de la anterior era que inconscientemente las llevarás al futuro, mientras que si empiezas de cero solo puede ser beneficioso».

Poco puede analizar del W13 que se presentará el 18 de febrero, pero por lo que ha visto «es un coche muy diferente al de la anterior era y cómo se produce la carga aerodinámica es